Por: Fernando Pérez Chávez
Opulencia en el Congreso
Gobernadores Corruptos
Culpables los Diputados
En Michoacán mientras tengamos un congreso podrido por los privilegios y la falta de transparencia, tendremos gobernadores corruptos como Lázaro Cárdenas Batel. Leonel Godoy Rangel, Fausto Vallejo Figueroa, Salvador Jara Guerrero y Silvano Aureoles Conejo.
Las fechorías cometidas por estos gobernadores han tenido su validación en el Congreso del Estado de Michoacán, pese a que supuestamente los 40 diputados funcionan como contrapeso frente a las facultades feudales de los señores gobernadores.
Si creemos que la investigación sobre ellos va a resolver la corrupción en el estado, somos ingenuos y optimistas, porque por esa razón fue designado José Luis López Salgado, como titular de la Auditoria Superior de Michoacán, para proteger a los ex gobernadores perredistas, Lázaro Cárdenas y Leonel Godoy, responsables del saqueo del erario público.
Y apenas hace unas semanas se destapó una red de extorsión dentro del Congreso de San Luis Potosí, cuando el diputado panista Enrique Flores apareció en un video donde ofrecía limpiar las cuentas públicas de un municipio a cambio del 10 por ciento de los montos observados.
En Michoacán esta nueva modalidad de crimen organizado utiliza las atribuciones constitucionales del Poder Legislativo y de la Auditoría Superior del Estado para diezmar los menguados presupuestos de los ayuntamientos michoacanos y para desvanecer irregularidades de presidentes municipales y ex funcionarios estatales.
Con este antecedente la pregunta es ¿Qué contexto de impunidad pude transformar a miembros del Poder Legislativo de Michoacán?, cuando esta es la línea del modus operandi del presidente de la mesa directiva de la LXXIII Legislatura, Pascual Sigala para el auditor José Luis López Salgado.
Esto viene a colación, luego de que el equipo del IMCO presentó un informe legislativo y realizó 800 solicitudes de información, 25 por Congreso, para recopilar los datos necesarios para el estudio, pero sólo 13 de 32 congresos estatales pudieron entregar su respectivo proyecto de presupuesto de egresos para 2017; el presupuesto del Poder Legislativo de Michoacán es 897 millones de pesos.
Otro de los aspectos relevantes del estudio del IMCO fue la existencia de partidas presupuestales para gasto social ejercidas desde los congresos estatales, una especie de sedesoles legislativas, porque en la gran mayoría de los congresos estatales ya se permite la reelección.
Ante esta situación el presupuesto social de los congresos se va a considerar dentro de los gastos de precampaña de los diputados que buscan reelegirse en sus puestos, pero claro con opacidad y débil rendición de cuentas en los congresos estatales, los comicios con reelección se pueden convertir en competencias muy disparejas.
Por otro lado, la recomendación más importante del estudio del IMCO es obvia y preocupante para que los congresos cumplan con los criterios de contabilidad y transparencia que exigen las normas, para que los diputados locales cumplan las leyes.

