Por: Fernando Pérez Chávez
Transición de Gobierno
Regreso la Inseguridad
Auditen Obras en Morelia
El fantasma de la inseguridad ha aparecido de nueva cuenta en Michoacán a unas horas de que inicien los trabajos de la entrega recepción de la transición de gobierno, que encabeza Salvador jara y que asumirá el primero de octubre Silvano Aureoles y en medio de los relevos de los “cuates” del ex comisionado Alfredo Castillo.
En esta transición serán Pavel Ocegueda, secretario particular de Salvador Jara, y Adrián López Solís, hombre de todas las confianzas de Aureoles Conejo serán los que encabecen la entrega recepción, aunque estos ya han sostenido reuniones para preparar el cambio y han abordado temas centrales como: la gobernabilidad, seguridad, finanzas y desarrollo social.
Sin sobresaltos y apertura se dará, pero al gobierno que encabezará Aureoles Conejo le esperan grandes retos y por ello es deseable que su equipo reciba toda la información y que no se vaya a echar debajo de la alfombra la basura para aparentar que todo está bien, porque hay muchos “focos rojos”.
La insolvencia económica de Michoacán de los últimos 14 años, no se ha podido revertirse el déficit que cada año generan la Secretaría de Educación en el Estado y la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo; en el primer caso hablamos de cinco mil 500 millones de pesos y en segundo de poco más de mil millones de pesos.
El actual gobierno heredará al de Aureoles una deuda, entre bancos y proveedores, de más de 31 mil millones de pesos en números redondos y el nuevo gobierno tendrá que renegociar la deuda y adquirir nuevos empréstitos al arranque de la gestión para poder librar los compromisos principalmente de fin de año.
Otro rubro delicado de Michoacán es la inseguridad pública, el que fue calificado por Aureoles como “riesgo latente” en el último encuentro con Jara, ante el repunte que han tenido los hechos de violencia en los días recientes; el Mando Unificado y la creación de la Fuerza Rural fueron medidas improvisadas que, han fracasado y que al final, han causado más dolores de cabeza al gobierno estatal.
Y bueno, Aureoles Conejo ha anticipado que iniciará con austeridad su mandato, porque le apuesta a un estado en paz, con armonía y estabilidad y ha advertido que habrá cambios profundos y ha advertido que la futura administración “no será bolsa de trabajo”, pero la verdad eso está en veremos.
Por otro lado, sería bueno que la auditoria Superior de Michoacán realice una auditoria en serio a la administración priísta del ex alcalde Wilfrido Lázaro y ahora de Salvador Abud, porque se realizaron varias obras y da pena ver en lo que están convertidas las principales vías de Morelia.
Finalmente Alfonso Martínez alcalde electo de Morelia, recibirá una ciudad llena de baches, inundaciones, inseguridad, cuarteaduras, falta de aditamentos, malos emplazamientos en las diversas obras que se hicieron con materiales de mala calidad y en las que se presume hubo corrupción, porque no se explica qué obras programadas con anticipación se hayan hecho con retraso o a la carrera y presenten tantas fallas.